El estado que tú deseas alcanzar es un concepto mental que se encuentra en lucha consigo mismo. Nunca puedes alcanzarlo porque es un concepto abstracto de quién quieres ser, y no te das cuenta de que tú ya eres eso.
Así pues, el estado de “no ego” nada tiene que ver con el futuro, no puedes hacer nada en el futuro, no puedes convertirlo en un objetivo. Si buscas el estado de iluminación o de “no ego”, no puedes hacer de ello una meta, ya que una meta implica futuro.
El verdadero punto de entrada para el estado de iluminación, o “no ego” es el momento presente.
Si tú ves esto como una meta que quieres alcanzar, pierdes el punto de entrada. Porque estás buscando en el futuro. Y esto genera un dilema en todo buscador espiritual. Porque escuchan conferencias espirituales o leen libros sobre la iluminación (no ego) y piensan: “Quizás yo también pueda alcanzar eso”. E inmediatamente se lo marcan como un objetivo a conseguir, como un proyecto a largo plazo. Y no se dan cuenta de que su propia búsqueda para realizar el estado de iluminación, le impide serlo en el momento presente.
El ego solo puede ser trascendido accediendo al poder del ahora (el estado de Ser). No hay otro camino.
La iluminación solamente aparece en el poder del ahora (el estado de Ser). En ningún otro lugar.
No hay nada que tú puedas hacer. Tú solo puedes permitir Ser al momento presente, y profundizar en ello.
No se requiere más tiempo o añadir más cosas para ser quien tú eres en esencia. Esto es lo que realmente importa.
La verdad es que tú ya eres eso, solo necesitas darte cuenta. Todo lo demás está en el nivel de la forma.
Así que, no más búsqueda espiritual. Intensidad sí, pero una intensidad que te conduce al Ahora. Tú ya estás iluminado.