Formarse ofrece a sus visitantes esta selección de links de descarga de libros
para que puedas disfrutarlos!!! |
Instrucciones:Para seguir los links de descarga hacer clik en los títulos. |
Aviso Legal y
Política del Website |
Poesias de Rafael Pombo-1 |

EL NIñO Y LA MARIPOSA
Mariposa,
Vagarosa
Rica en tinte y en donaire
¿qué haces tú de rosa en rosa?
¿de qué vives en el aire?
Yo, de flores
Y de olores,
Y de espumas de la fuente,
Y del sol resplandeciente
Que me viste de colores
¿Me regalas
tus dos alas?
¡son tan lindas! ¡te las pido!
deja que orne mi vestido
con la pompa de tus galas
Tú, niñito
tan bonito,
tú que tienes tanto traje,
¿Por qué quieres un ropaje
que me ha dado Dios bendito?
¿De qué alitas
necesitas
si no vuelas cual yo vuelo?
¿qué me resta bajo el cielo
si mi todo me lo quitas?
Días sin cuento
De contento
El Señor a ti me envía;
Mas mi vida es un solo día,
No me lo hagas de tormento
¿te divierte
dar la muerte
a una pobre mariposa?
¡ay¡ quizás sobre una rosa
Me hallarás muy pronto inerte.
Oyó el niño
Con cariño
Esta queja de amargura,
Y una gota de miel pura
Le ofreció con dulce guiño
Ella, ansiosa,
Vuela y posa
En su palma sonrosada,
Y allí mismo, ya saciada,
Y de gozo temblorosa,
Expiró la mariposa .
|
EL RENACUAJO PASEADOR
El hijo de Rana, Rinrín Renacuajo,
salió esta mañana, muy tieso y muy majo.
Con pantalón corto, corbata a la moda,
sombrero encintado y chupa de boda.
"¡Muchacho, no salgas!" Le grita mamá.
Pero él hace un gesto y orondo se va.
Halló en el camino a un ratón vecino.
Y le dijo: "¡Amigo! venga, usted conmigo.
Visitemos juntos a doña Ratona
y habrá francachela y habrá comilona".
A poco llegaron, y avanza Ratón.
Estirase el cuello, coge el aldabón.
Da dos o tres golpes, preguntan: "¿Quién es?"
"–Yo, doña Ratona, beso a usted los pies".
"¿Está usted en casa?" –"Sí, señor, sí estoy:
y celebro mucho ver a ustedes hoy;
estaba en mi oficio, hilando algodón.
“Pero eso no importante; bienvenidos son".
Se hicieron la venia, se dieron la mano,
y dice Ratico, que es más veterano:
"Mi amigo el de verde rabia de calor,
démele cerveza, hágame el favor".
Y en tanto que el pillo consume la jarra
mandó la señora traer la guitarra
y a Renacuajito le pide que cante
versitos alegres, tonada elegante.
"–¡Ay! de mil amores lo hiciera, señora,
pero es imposible darle gusto ahora,
que tengo el gaznate más seco que estopa
y me aprieta mucho esta nueva ropa".
"–Lo siento infinito, responde tía Rata,
aflójese un poco chaleco y corbata,
y yo mientras tanto les voy a cantar
una cancioncita muy particular".
Mas estando en esta brillante función.
De baile y cerveza, guitarra y canción,
la Gata y sus Gatos salvan el umbral,
y vuélvase aquello el juicio final.
Doña Gata vieja trinchó por la oreja
al niño Ratico maullándole: "Hola"
y los niños Gatos a la vieja Rata
uno por la pata y otro por la cola.
Don Renacuajito mirando este asalto
Tomó su sombrero, dio un tremendo salto,
y abriendo la puerta con mano y narices,
se fue dando a todos "noches muy felices".
Y siguió saltando tan alto y aprisa,
que perdió el sombrero, rasgó la camisa,
se coló en la boca de un pato tragón
y éste se lo embucha de un solo estirón.
Y así concluyeron, uno, dos y tres,
ratón y Ratona, y el Rana después;
los gatos comieron y el Pato cenó.
¡Y mamá Ranita solita quedó! |
|
JUAN MATACHíN
¡Mírenle la estampa!
Parece un ratón
que han cogido en trampa
con ése morrión.
Fusil,cartuchra,
tambor y morral,
tiene cuanto quiera
nuestro general.
Las moscas se espantan
así que lo ven,
y él mismo al mirarse
se asusta tambien.
Y a todos advierte
con lengua y clarín:
"¡Ay de aquél que insulte
a Juan Matachín!". |
|

LA MARRANA PERIPUESTA
Viénele a un mono la chusca idea
De ornar con flores a una marrana,
Y ella al mirarse ya tan galana,
Envanecida se contonea.
Y a cuantos mira grúñeles: ¡ea!
¡paso a la venus! ¡todos atrás!
¡ah! dijo el zorro: siempre eres fea;
pero adornada: ¡mil veces más! |

LA MEMORIA
Oh perfecto presente del pasado,
vida de tanto amado ausente y muerto,
que poblando aquel fúnebre desierto
burlas del tiempo el hierro despiadado!
En mi hoy, más prosaico y desolado
que el muerto ayer, me ofreces más de un puerto
do a buscar vuelvo en mi soñar despierto
un asilo poético y sagrado:
un temple a cuya entrada unjo con llanto
el corazón, y en otro mundo, el eco
de inolvidables voces, oro y canto.
¿Será tal fruición juego, embeleso
y no fiel prenda, misterioso rito,
aurora boreal de lo infinito? |
|
|