Curiosidades que desconoces sobre Gustave Flaubert
La obra maestra Madame Bovary, una historia de amor brutal y realista que trataba sobre el adulterio, fue condenada como pornográfica cuando se publicó por entregas en un periódico en 1856, y Flaubert fue acusado de ofender la moral pública y la religión. La corte censuró el libro, pero absolvió a su autor. Aunque la novela estaba vendiéndose a miles, Flaubert dijo que deseaba tener bastante dinero como para comprar cada ejemplar, “arrojarlos todos al fuego y no volver a oír hablar del libro jamás”.
Gustavo Flaubert dijo en cierta ocasión: Madame Bovary soy yo, y lo era como padre de “su” criatura a la que le había dado la etiqueta de un nombre, pero él no inventó a Madame Bovary, no creó de la nada a un personaje singular; lo único que hizo fue colocarlo en el escaparate de un libro, porque su heroína es tan vieja como la humanidad misma desde el momento en que existieran hombres y mujeres despojados de la rudeza de las épocas prehistóricas; es de suponer que aquellas mujeres no estuviesen para romanticismos.
El retrato de Emma Bovary que tanto escándalo causó en el seno de una sociedad más hipócrita que puritana, trayéndole, por añadidura, numerosos quebraderos de cabeza a su autor, es el retrato robot de un arquetipo de mujer que se halla mucho más vigente de lo que muchos puedan llegar a imaginarse.
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