Cómo reunirse con un hombre bueno ?
Por Thomas G. Fiffer. The Good Men Project
Parte I
Hay un programa en muchas psiquis femeninas, que dice que no es posible encontrar un hombre bueno. La guerra de los sexos, producto de la separación con nosotras mismas, ha dejado heridas en ambos lados de la relación.
Este es un artículo escrito por un hombre, el artículo es largo, y puede que mueva sentimientos encontrados. Pero es bueno escuchar cómo algunos hombres miran su espacio en una pareja.
Para reflexionar, compartir, sonreír, sentir, y amar.
Un buen hombre, dicen, es difícil de encontrar. Bueno, no en realidad. Hay millones de hombres buenos ahí fuera. Millones. Hombres buenos cuyas intenciones son honorables. Hombres buenos cuyo comportamiento en relación a las mujeres es bondadoso y respetuoso. Hombres buenos que aprecian el amor y valoran el compromiso. Hombres buenos que operan en base a un código de moralidad y conducta honesto en sus vidas personales y profesionales. Hombres buenos que no necesitan ser chicos malos para probarse a si mismos. Y esos hombres no están escondidos. Están en todas partes, a simple vista.
Qué hacer.
1. Honestidad. Este es la oferta absoluta para un hombre bueno. No necesita conocer todos tus secretos, al menos, no al principio de vuestra relación. Pero no hay un mayor botón de apagado que el encontrarte en una mentira acerca de algo a unas semanas o unos meses en la relación.
Todos tenemos ropa sucia – cosas de las que nos arrepentimos de nuestro pasado, miembros disfuncionales de nuestra familia, temas financieros – y es crucial ser verdadera desde el principio.
A un buen hombre no le gusta hacer preguntas probatorias o interrogar a su potencial compañera, porque quiere verte en la mejor luz.
Pero si pregunta, o si estás ocultando algo por temor a que no te vaya a querer si lo descubres ante él, es mejor que seas abierta y aclares el aire antes de que la relación progrese. Los hombres buenos son genuinos, dispuestos a ser vulnerables, y abiertos a la intimidad con alguien en quien confían. Pero si los haces sentir engañados, se van a dar la vuelta y van a marchar.
2. Respeto. No se trata sólo de que a un buen hombre le guste ser respetado, es que él sabe que lo merece. Merecer algo es diferente de sentirse habilitado para eso. Merecer significa que conoce su propio valor. Si mantiene su casa ordenada y no quiere los platos en la mesa o la ropa tirada en el suelo, no hagas bromas con sus hábitos, respeta la forma en que trata su hogar. Si tiene actividades que valora pero no son tu taza de té, no te burles porque sus intereses te parezcan raros. Y si establece una frontera alrededor de su tiempo, su dinero, su familia o su grado de implicación emocional contigo- respeta eso. El sentido común dice que las mujeres ponen a prueba a los hombres todo el tiempo, pero los hombres también testan a las mujeres o a cualquier pareja potencial, a su manera. Un hombre bueno no quiere que alguien entre dentro de su vida de modo que esa persona pueda caminar encima de él.
Parte II (A medida que voy traduciendo el artículo de Thomas Fiffer, noto que remueve muchas cosas en mí).
Es el encuentro con la pareja, visto del lado del hombre, y, por contraste, remueve recuerdos, sensaciones, sentimientos y emociones.
En realidad, lo que siento es que lo que él llama el Hombre Bueno, es únicamente posible en un hombre Presente.
Presente significa consciente de sí mismo, centrado en su eje, en su espacio del corazón. O, al menos, un hombre que se observa a sí mismo, o hace alguna práctica espiritual.
Y esta clase de hombre, sólo puede resonar con una mujer que está vibrando en ese mismo estado del Ser. Así es que el único camino para alcanzar una intimidad verdadera, en auténtico respeto y unidad, es la vivencia del estado de Presencia.
Aquí mismo en esta página, veo celebrarse uniones felices, y conozco algunas parejas, no muchas, que participan juntos de este juego de la vida, y disfrutan y crecen con ello.
En todos los casos, se trata de personas que transitan el camino de la consciencia, y que saben que ese estado, el estado de Transparencia, de Entrega consciente al Supremo en cada uno, sólo se nutre por medio de vivirlo.
Esto se ve reflejado en el mito de la Bella Durmiente, el Alma, que es despertada por el beso del Espíritu.
Así, la primera pareja a cultivar, es la pareja con el propio Ser Supremo, con lo más alto de nosotros mismos, y el mejor espacio a compartir, es el Espacio que le damos a nuestro propio Yo Real en la vida de cada día.
Entonces, queda abierto el camino para que llegue el Hombre Bueno, la Mujer Buena, con la que compartir desde un lugar donde cada herida es sanada a medida que emerge, y cada talento es regado de a dos, y cultivado, en espiral, hacia fuera, y hacia arriba.
Qué sienten acerca de esto?, compartir nos enriquece….
Parte III
Siguen moviéndose energías, memorias, sentimientos, emociones, y …. juicios.
Los errores que describe, forman parte de un extenso programa en el que estamos inmersos, tanto nosotras como ellos.
Es el programa que dice que no podemos compartir amor auténtico por lo que somos, sino que tenemos que controlar y manipular al otro para tenerlo a nuestro lado.
Y, en este caso, a mi entender, se está filtrando el dolor del hombre por haber experimentado las consecuencias de estos programas.
Cuando lo traducía, recordaba, siendo más inmadura, haber seguido estas conductas, pero también, y más recientemente, haber experimentado esto mismo en carne propia, juegos, victimismo y drama para recibir toda la atención, desplegados, en este caso, por el hombre que estaba a mi lado. Lo que el artículo expone, es quizás la necesidad, por parte de ambos sexos, de vivir y crear finalmente una relación Nueva, entre dos personas conscientes. Porque entre dos personas conscientes, no son necesarias las manipulaciones, ni de un lado, ni del otro. Somos humanos, y esto surge, y cuando surge, si estamos conscientes, podemos dejarlo atrás. Qué les parece? Compartimos sentires y experiencias?… |
Qué no hacer.1.No drama.
No le gusta el drama o el inevitable conflicto que viene con él. Ha trabajado duro para obtener un ritmo pacífico en su vida. Ha removido gente tóxica de su vida, o los ha puesto a distancia. Está tratando de construir un futuro y un legado, y no tiene tiempo para una telenovela interminable. Si tu gato necesita ir al veterinario a las dos de la mañana, va a aparecer y te va a llevar. Pero si tu amigo el alcohólico o adicto necesita ser trasladado – otra vez – y ser llevado a casa para desintoxicarse o llevado a urgencias, te vas a encontrar con que cuentas sólo contigo misma. 2.No juegos.
Un buen hombre desprecia los juegos. Es frontal y directo. Si te gusta, hazle saber. Pídele tomar un café o un trago. Es así de simple. Si te envía un mensaje, busca una respuesta, no un juego de esperas. Y si lo buscas y no te responde, es porque está ocupado, no porque te está ignorando. Si le presionas o lo aprietas con llamadas y textos preguntando dónde está, o sugiriendo que no le importas, va a cortar, te va a sacar de sus contactos, y te va a bloquear en su celular. 3.No hacer el papel de víctima. Si has sobrevivido a algún tipo de victimización, un buen hombre te va a ayudar a sanar. Pero si tu numerito es que siempre eres víctima en cualquier interacción, que cualquier cosa que te pasa es por la falla de alguien, puedes olvidarte de enganchar un hombre bueno desde ahora mismo. Porque él sabe que eventualmente, va a ser el acusado. Un hombre bueno quiere una compañera fuerte que es honesta acerca de la contribución de cada uno en cada situación, y no va a permitir ser injustamente acusado o criticado. No te sorprendas si te señala tu queja y trata de enderezarte. Te va a dar una chance de crecer, y si no la tomas, va a encontrar alguien con mayor madurez emocional. |