Beneficios de la dieta mediterránea
Ivan Aranaga Amengual
La dieta mediterránea te aporta mucho más que una alimentación deliciosa
La trascendencia de esta dieta la ha llevado a ser reconocida comoPatrimonio Inmaterial de la humanidad, declarado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura(UNESCO). Además de ser una forma de alimentación, cuenta con un carácter de tradición y costumbres, porque involucra factores culturales y folclóricos.
Decálogo mediterráneo
La Fundación Dieta Mediterránea detalla una serie de cualidades de este tipo de alimentación:
La principal grasa es el aceite de oliva, el cual contiene vitamina E, betacarotenos y ácidos grasos monoinsaturados que le confieren propiedades cardioprotectoras.

Abundancia de productos de origen vegetal que aportan minerales, vitaminas, fibra y agua. Por ejemplo:
- Frutas
- Verduras
- Legumbres
- Champiñones
- Frutos secos
Los cereales (pasta, arroz) y el pan deben formar parte del consumo diario, aunque son preferibles en formas integrales. Son los responsables de los carbohidratos que brindan la energía necesaria para el organismo.
Los alimentos más adecuados en todo momento son los que estén en temporada. Los lácteos, como el yogur y el queso, deben estar presentes en la comida diaria, porque aportan proteínas, minerales y vitaminas, además de favorecer el equilibrio de la flora intestinal.
El postre debe basarse en frutas frescas y los dulces deben ser ocasionales. El agua es la bebida por excelencia de este tipo de alimentación, mientras que el vino debe moderarse y solo consumirse durante el almuerzo ya que ofrece propiedades antioxidantes.
Por último, el ejercicio físico es el acompañante imprescindible de la alimentación. Dicho esto, repasemos 11 beneficios de la dieta mediterránea.
11 beneficios de la dieta mediterránea
1. Combate el llamado colesterol malo
Entre los principales beneficios de la dieta mediterránea se encuentra el consumo en abundancia de mariscos, pescado y vegetales, en contraposición con la ingesta moderada de carnes rojas. Esto se relaciona con una disminución en los índices de colesterol.
2. Es beneficiosa para el corazón
La dieta mediterránea ayuda a disminuir los riesgos de padecer enfermedades cardiovasculares, debido a que reduce la hipertensión arterial, gracias a la presencia de ácidos grasos insaturados combinados con los nitratos y nitritos de los vegetales.
Dichos ácidos grasos se pueden encontrar en los frutos secos, el aceite de pescado, las aceitunas y el aguacate.
3. Previene los ACV
Una de las afecciones clínicas más comunes hoy en día son los accidentes cerebrovasculares, mejor conocidos como ACV.
La dieta mediterránea reduce significativamente el riesgo de padecerlos ya que es rica en frutos secos y aceite de oliva, los cuales evitan los ACV.
Esto de acuerdo con los resultados del Centro de Investigación sobre la Nutrición Humana y el Envejecimiento de la Universidad de Tufts, en Estados Unidos e investigadores del Instituto de Salud Carlos III.
4. Evita problemas estomacales
Los nitritos de vegetales verdes combinados con polifenoles (sustancias antioxidantes) en manzanas y vino tinto funcionan como un protector gástrico. De esa manera se previenen las afecciones estomacales como úlceras y ayudan a aliviarlas en caso de ya padecerlas.
5. Evita el Alzheimer y la demencia
El huevo es un elemento importante en la dieta mediterránea. Con este alimento las funciones cerebrales se potencian gracias a un estado óptimo de los vasos sanguíneos. De allí que la probabilidad de deterioro mental disminuya en personas que siguen esta dieta.
6. Controla la diabetes
Gracias a la alimentación baja en grasas y postres endulzados, la dieta mediterránea contribuye a controlar la diabetes tipo 2.
7. Ayuda contra la obesidad
El adecuado balance de alimentos, el moderado consumo de carbohidratos, azúcares y bebidas pasteurizadas o gaseosas, así como la presencia de vegetales, grasas “buenas” y proteínas permite tanto bajar de peso, como mantenerse en el peso ideal.
8 .Previene el Parkinson
Los alimentos de esta dieta tienen un gran poder antioxidante, que previene el deterioro celular y reduce las probabilidades de sufrir mal de Parkinson.
9. Protege los huesos
La ingesta adecuada de productos ricos en calcio ayuda al fortalecimiento de los huesos, lo que permite evitar las fracturas y afecciones óseas.
10. Brinda agilidad
Los alimentos nutritivos de esta dieta favorecen la firmeza y fuerza muscular, lo que se traduce en una mayor aptitud física, sin importar la edad.
11. Antienvejecimiento
La abundancia de antioxidantes, calcio, así como la disminución de la probabilidad de padecer diversas afecciones, implican una mejor salud física y, con ello, una vida sana, larga y productiva.
Como vimos, son muchos los beneficios que aporta este régimen alimentario a tu organismo.
Si deseas incluirlo en tu rutina, consulta con un especialista para que tu transición sea la más adecuada.