Me gustan las cosas simples: un abrazo, un «gracias», un «cuidado»
Me gustan las cosas simples: un abrazo, un «gracias«, un «cuidado». Me considero un admirador fiel de las personas simples, porque para mí son las más bellas, son las que se dejan guiar por el sentido común, la intuición y un corazón que no sabe mentiras.
Es curioso saber que, hoy en día, está de moda recuperar el valor de la simplicidad, tanto en el desarrollo personal como en el contexto de las grandes organizaciones. De hecho, muchos expertos en marketing y publicidad han adoptado un lema casi infalible: «hazlo simplemente y lo obtendrás».
Cosas simples
Me gusta el olor de la gente sencilla, el aroma del respeto, la sonrisa de «buenos días», la sincera «atención». No hay falsedad en su aspecto bello y ni siquiera en su alma.
El autor español Antonio Machado afirmó que «es típico de los hombres con cabezas pequeñas atacar todo lo que no entra en sus cabezas». Este es sin duda un buen ejemplo para describir tales personalidades, por lo que las cosas simples no tienen sentido. Confunden simplicidad con superficialidad; bueno, la simplicidad no tiene nada que ver con la ingenuidad, y mucho menos con la necedad.
De hecho, este concepto tiene un gran poder del que apenas somos conscientes.

El poder de la simplicidad, el poder de las emociones y la inteligencia.
Este año, BMW ha anunciado el nuevo modelo bajo el lema «El placer de conducir». En este anuncio, se dejan de lado las características físicas del producto y su tecnología, para hablar sobre la sensación que produce la conducción.
Este es un ejemplo para mostrarle el poder de la simplicidad. Sin embargo, este anuncio representa un acto de coraje por parte de sus directores creativos; Para ellos, así como para todos aquellos que confían en el valor de la simplicidad, la elementalidad y las emociones, se les reprocha estas cosas:
- Quienes practican el valor de la simplicidad también son «simplones», personas que no se esfuerzan por mostrar algo más profundo, más sofisticado y elaborado.
- Si eres simple, todos serán como tú, no puedes salir. En el caso de este anuncio, es que «es tan simple y trivial que todos podrían haberlo hecho».
En realidad, cuando buscas simplicidad, te paras junto a los mejores pensadores del mundo. Porque, como dijo Winston Churchill, «de las complejidades más intensas nace la simplicidad más bella».
La belleza de la simplicidad en los gestos cotidianos.
A menudo se dice que la vida es como una telaraña. Nuestras líneas se entrelazan en rincones extraños, tomamos caminos equivocados, nuestros esfuerzos no coinciden con nuestros éxitos y, al final, seguimos apegados a estas realidades terriblemente complejas y desalentadoras.
«La ausencia de simplicidad lo arruina todo»
(Miguel de Unamuno)
Un «abrazo», un «gracias»
¿Por qué, entonces, nos resulta tan difícil deleitarnos con la simplicidad de los gestos cotidianos? ¿Por qué hacemos la vida tan complicada? En cierto sentido, está conectado con lo que dijimos hace un momento. El alma simple y la mirada humilde son dimensiones que están un poco fuera de lugar en una sociedad que asocia la complejidad con la efectividad y, por lo tanto, con la felicidad.
Nos venden computadoras con muchos programas, móviles con infinitas aplicaciones, los peluqueros nos ofrecen innumerables tratamientos capilares y todos los días nos recuerdan que es bueno tener muchas calificaciones educativas, muchos amigos. La complejidad está vinculada a esta brillante idea de felicidad que, en realidad, no siempre se hace realidad.

Me gustan las cosas simples
Una cosa que siempre debemos recordar es que las cosas grandes suceden cuando hacemos bien las pequeñas y, para este propósito, no hay nada mejor que practicar el arte de la simplicidad en nuestros gestos diarios.
Muévase lentamente, consciente de lo que nos rodea, utilizando el sentido común y la intuición … Esta es sin duda la mejor estrategia para deshacerse de todos los nudos de la complejidad diaria. Debemos confiar más en nuestros instintos y ser receptivos a la voz del corazón.
Apuesta por las cosas simples
A menudo dejamos que una gran parte de nuestras vidas se salga de control, inmersos en esfuerzos fallidos que nos alejan millas de nuestra verdadera esencia. Recuerde que la complejidad no es admirable, debe evitarse, porque saber a lo que podemos renunciar es la única forma que nos permitirá obtener lo que realmente merecemos. ¿Quieres saber de qué se trata? Amor, libertad, integridad y realización personal.
Cuéntanos aquí si eres una persona simple o compleja.